Vecina boliviana me da el culo en la azotea y pide corrida adentro

Mi vecina latina se puso caliente y no quiso esperar. Me escribió para vernos en la azotea, con esa faldita corta de jean y sin intención de disimular lo puta que estaba. Apenas llegué, me llevó a un rincón y me dijo al oído que quería el culo bien lleno. La puse en cuatro, le corrí la tanga a un lado y se la metí hondo, sintiendo cómo se abría para recibirme. Gritaba, gemía y me pedía que no parara hasta correrme dentro de ella. Fue rápido, intenso y sucio… justo como nos gusta.

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12 agosto, 2025