Morochita ardiente con culo perfecto se deja follar en perrito y piernas al hombro

Era una morochita con esa piel que pide ser tocada y un culito pequeño, pero tan perfecto que hipnotiza. La cogí con ganas, empezando en la posición que más la hace gemir: de perrito, con su espalda arqueada y su culo en alto, pidiendo más. Cada embestida la hacía soltar suspiros calientes. Luego la tomé con las piernas al hombro, y ver su cuerpo temblar mientras la penetraba profundo fue una delicia. Sus ojos brillaban de placer, su piel sudaba deseo, y yo solo pensaba en llenarla por completo. Un polvo de esos que se graban en la memoria… y en la piel.

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25 mayo, 2025