La mamada que me deja con los huevos vacíos
07:00 HD- 9618 vistas
-
- separator
Ella tiene esa mirada cuando se lo propone, cuando quiere hacerme suyo sin pedir permiso. Me empuja sobre la cama, se acomoda entre mis piernas y empieza a chupar con esa boca suya que conoce cada rincón de mí. No se detiene hasta sentirme temblar, como si necesitara vaciarme por completo. Después se sube encima, jadeante, y comienza a moverse con ritmo, con hambre, con placer. Sus gemidos se expanden por todo el cuarto, se agarra fuerte de mis hombros y se corre con una intensidad que me arrastra con ella. No hay nada como sus ganas de sacarme hasta la última gota.
7 junio, 2025